En este post encontrarás un breve debate y los argumentos a favor y en contra de optar por la Optimización de la Conversión o la Creatividad en el blogging.

¡Hoooooola de nuevo! ¿Cómo va eso por ahí? Aquí ahora mismo calor, aunque anoche caían unos relámpagos que parecía la Discoteque. Madre mía. Y todo esto viendo Gran Hermano, que no veas la que han liado. Que si metiendo a la ex del que se ha liado con la rubia y luego el colega se queda con la ex y a la rubia le cambia la forma de hablar … en fin. Ah! y ¿sabes qué?, he tenido una conversación con mi vecina. ¡En serio!

Pero, primero, lo que te ha traído aquí. Hoy tengo el honor de contar con Alex Soler, de El blog del Súper Afiliado, para debatir (luchar, pero sin pelear) acerca de qué postura es más adecuada para tu blog: ¿optimización de la conversión o creatividad? … Bueno, mejor que te lo cuente él. Aquí te lo dejo:

¿Por qué estoy aquí hablando con vosotros como invitado de Víctor?

Todo empezó en el post de Víctor en el que hablaba de una nueva forma de capturar emails en su página web. Según sus propias palabras, se enamoró de Typeform y decidió utilizarlo para mejorar la experiencia del usuario a la hora de registrarse en su blog.

Cuando lo vi, lo primero que pensé es que independientemente de la experiencia que tuvieran, el proceso era mucho más largo que una simple caja de registro a la que todo el mundo está habituado. Y por tanto, le dije que sería interesante ver cómo afectaba ese experimento a la conversión. ¿Conseguiría más registros? ¿Menos? Mi sorpresa fue cuando me comentó que él es partidario de seguir sus instintos y hacer lo que le gusta, independientemente de si mejora los resultados o no.

Tal vez sea porque antes de dedicarme a esto del marketing fui científico, o tal vez sea porque la mitad del tiempo me la paso leyendo blogs sobre optimización de conversiones, pero el caso es que pienso que es mejor dejar de lado los sentimientos y tomar decisiones únicamente basadas en datos objetivos.

Cualquier página web tiene un objetivo final. Para la mayoría de mis lectores y supongo que los de Víctor también, este fin último es ganar dinero. En otros casos (artistas, escritores, etc.) el objetivo tal vez no es ganar dinero, pero siempre hay un objetivo final cuantificable (más seguidores, más comentarios, llegar a más gente, etc.).

Por tanto, cualquier decisión que tomemos en cuanto al diseño de la web, puede afectar directamente al objetivo final. Y por eso es imprescindible tener herramientas para poder cuantificar la conversión de ese objetivo.

Volvamos al ejemplo del formulario. En este caso, además del objetivo final de la web, hay un objetivo inmediato perfectamente cuantificable (número de registros).

Victor ha decidido cambiar una caja de registro “normal” por un formulario de Typeforms, que además le permite extraer más información mediante unas preguntas extra. A nivel de conversión pueden pasar 3 cosas:

– Que suba.

– Que Baje.

– Que se quede igual.

Si sube, no hay duda: la decisión ha sido buena. Si se queda igual, seguramente también porque está consiguiendo información extra. Y si baja, será cuestión de ver si la bajada es compensada por la información extra que obtiene de los que sí se registran.

Por tanto, mientras tengamos las herramientas para poder medir esta conversión, siempre podremos tomar una decisión “fría” sobre si ha sido un buen cambio o no.

Lo que dice Victor es que incluso aunque los números le digan que se ha equivocado, es posible que lo mantenga, por su “espíritu rebelde”.

Lo que yo digo es que si algo está afectando negativamente a tu objetivo final, no deberías hacerlo. Ojo, no quiere decir no probar cosas nuevas. Al contrario, estoy a favor de probar tantas cosas como sea posible. Eso sí, siempre que sus efectos se puedan cuantificar y podamos decidir objetivamente en base a ellos.

Tal vez parezca poco “romántico”, pero como he dicho antes, cada página web tiene un objetivo último. Por tanto se trata de fomentar las cosas que aumenten dicho objetivo, y eliminar las que lo afecten negativamente.

Y si no, siempre podemos reducir la cuestión al absurdo. Y lo hago con una pregunta para Victor: Si descubrieras que Typeform hace que nunca nadie más se registre en tu web, ¿lo seguirías manteniendo? Si tu respuesta es no, quiere decir que sí que es importante la conversión del formulario en tu decisión. La única cuestión es dónde pones el umbral de decisión. Y lo pongas donde lo pongas, queda clara una cosa:

El porcentaje de conversión es un factor a tener en cuenta en tu decisión, y por tanto es imprescindible estarlo midiendo en todo momento.

[piopialo vcboxed=»1″]Me decanto por los argumentos de @alexsolerjover sobre CRO en el Blogging.[/piopialo]

Mis argumentos a las palabras de Alex

Vaya, Alex, sin duda me has dejado en bragas (como expresión, no te vayas a pensar lo que no es …) con tus palabras. No tengo argumentos para contradecir los tuyos puesto que los comparto. Estoy totalmente de acuerdo que [piopialo]cualquier acción que vaya en contra del objetivo de tu web / blog deberías descartarlo[/piopialo], permitiéndote probar pero siempre analizando la conveniencia o no.

Ahora bien, y te adelanto que los números no son buenos para mí, ¿objetivo específico u objetivos globales?.

En mi caso, por ejemplo, aceptaría perjudicar al objetivo específico de la suscripción si estoy trabajando o mejorando en otro objetivo mayor: diferenciarme en un mundo tan competido.

Antes de seguir, quiero contar mis números para que veáis que mi decisión no parece haber sido muy buena, desde el punto de vista de la conversión:

Desde la implantación de Typeform (Julio 2014), el número de registros se ha mantenido. Esto, podría parecer una buena noticia pero, en realidad, no lo es porque también he ido agregando otros medios de suscripción por los que estoy recibiendo resultados. Si en Enero de 2014 mi única fuente de suscripción era el banner y éste me traía 30 suscriptores nuevos por mes, ahora obtengo 30 nuevos suscriptores a través del formulario de pie, el banner y el popup. Por tanto, el banner ha perdido rendimiento (el banner es el único que funciona con Typeform).

Sólo un 26 % de la gente que pica en el banner acaba la suscripción. Esto es un resultado muy chungo. O sea que le ha parecido atractivo el banner pero, una vez accedido al formulario, no ha terminado de completarlo. Lo que no puedo saber es si esto guarda una relación directa con la supuesta “dificultad” de rellenarlo o el hecho de que sea un proceso más largo, como bien señala Alex. Lo que sí está claro es que un 74% menos de suscriptores hace mucho daño.

Por qué, aun así, decido mantener el sistema de Typeform

He de reconocer que esta actitud es un tanto masoquista. Si después de revisar los números decido seguir con la opción de suscripción a través de Typeform es porque no he entendido mucho acerca del mundo del Marketing Digital, ¿verdad?.

Es un poquito como el [piopialo]“haz lo que yo diga pero ciento volando o agua lleva”[/piopialo], ¿no crees?. Amos, lo peor. Pero, ¿acaso no soy una persona “distinta” en como enfoco mi blog? ¿Acaso no puedo decir que también perjudica que te hable de Gran Hermano (no veas, al final la gente se ha puesto en contra de Omar y Lucía. Pero es normal, es que menuda han liado…)?. Pues sí, pero eso es lo que hay.

Así que, si aún te quedan fuerzas y si prefieres acabar el post antes de ir a ver el 24 horas de GH, aquí te dejo mis argumentos para “nadar a contracorriente”:

• Nunca dejaré de ser fiel a mi “yo mismo”. Aunque me perjudique en factores puramente fríos y estadísticos, jamás dejaré de mostrarme como yo soy pues me estaría traicionando y ya llevo unos cuantos posts escritos como para hacerlo. Por muy perjudicial que sea, este es mi estilo y mi factor diferenciador.
• No puedo asegurar que la estadística del 26 % sea por culpa de Typeforms. En el banner lateral, mi mensaje era “descubre un método de suscripción que no conocías”. Por tanto, esto puede propiciar que alguien pinche, movido por su curiosidad y luego no complete el registro porque realmente no tenía intención de hacerlo. Por mi parte, lo que busco son “lectores”, no “números”.
• Busco “lectores”, no “números”. Siempre he dicho que lo que yo busco es gente realmente interesada por mi contenido o por la forma que tengo de contarlo. Esa gente, por lo que yo creo, estará dispuesta a invertir unos pocos minutos más en la suscripción (de hecho, la mayoría elige rellenar la encuesta) ya que quiere conseguir algo que realmente desea: recibir mis posts o el regalo que prometo. Los números, gente que completa el registro antes de darse cuenta de que no lo quería realmente, no me interesan demasiado.
• Obtengo más información con la suscripción, por norma general. Como ya he dicho antes, la mayoría de la gente que se suscribe opta por rellenar la encuesta y se siente más valorada. Además, yo paso a conocer un poco mejor a mis nuevos suscriptores y puedo adaptar mejor mi contenido a sus deseos. Creo que es muy valioso para ambos.
• Mantengo mi postura rebelde y “disruptiva”. Cosa de la que, aunque no llegue a ser “líder de masas”, me enorgullezco. Mi “marca personal” es la de romper con lo establecido y buscar nuevas formas de hacer lo mismo. No siempre lo consigo, pero siempre estoy intentándolo.

Conclusiones finales

En resumen, si decides contratarme para intentar hacer crecer tu comunidad o web, probablemente me oirás defender la postura de Alex, pues es la correcta, probada, razonable y eficaz. Sin duda, es la que deberás adoptar.

Peeeero, éste es mi blog, éste es mi lugar y mi principal objetivo es el de contar una historia a mi propia forma. Por tanto, por pequeñita que se quede, creo que la gente que frecuenta esta humilde casucha espera chistes malos (como el de “mira un cohete! Va a Venus! Pos vamos a escondenus!), marujeos y cuentos acerca de mi vecina que tiene una regla un tanto irregular (mi, se me ha escapado), posts hiper-largos y formas no muy comunes de hacer las cosas.

Gracias Alex, de verdad, por este interesantísimo post que has provocado y por aportar la visión más lógica y correcta a mis “desvaríos”.

¿Y tú? ¿Qué opinas? ¿Crees que actúo bien? ¿Te decantas por la postura de Alex? ¿Crees que existe un equilibrio entre ambas? ¿Ves ya por fin Gran Hermano? ¡Cuenta cuenta!